El team coach de Grado Leinn Valencia que se imparte en el Campus Valencia de Florida Universitària explica la metodología que se utiliza para ser una persona emprendedora con poco más de 17 años
Víctor Vázquez, team coach del Grado Leinn Valencia que se imparte en Campus Valencia de Florida Universitària, analiza para Radio Plaza cómo aprende y se forma el alumnado del innovador grado que se imparte en la ciudad de Valencia.
“Nuestros alumnos son completamente diferentes. A parte de indicadores como derecho, informática, matemáticas, etc… tienen indicadores de facturación, beneficio, visitas, lecturas de libros, etc… y todos estos indicadores tienen que conseguirlos de la vida real, es una carrera diferente para un mundo que no para de adaptarse a los cambios. Esto lo conseguimos con el mundo real. Los alumnos en primero montan una empresa y tienen que continuar en esta empresa hasta cuarto. Los indicadores cada año crecen en intensidad, y no sólo se quedan ahí. En primero se van a Europa, en segundo a Estados Unidos y en tercero a China e India. Hacemos estos viajes porque queremos que nuestro alumnado no tenga problemas para trabajar aquí, en Madrid, Filipinas o en Sudamérica. Queremos que sean trabajadores y trabajadoras o emprendedores y emprendedoras que se adapten a cualquier situación, a cualquier lugar y a cualquier momento.
Les damos las herramientas para adaptarse al cambio para que cuando trabajen se adapten con facilidad y rapidez a lo que te venga. Son alumnado jovencísimo que monta una empresa real, con una facturación real, … y se prueba que están trabajando. Realmente es una carrera universitaria. Pero funcionamos con los indicadores de facturación mensual, con sus declaraciones de IVA, y auditorías como todas las empresas. Tenemos asesores legales y fiscales que les hacen auditorías cada seis meses. Es la vida real. Necesitamos que los alumnos sepan cómo gestionar una empresa y lo sufran cada seis meses y sepan cómo se hace y dónde se hace. Llegan a presentar hasta la documentación.
No siempre está el mismo alumno, para que todos aprendan de los demás. Ellos constituyen su propia sociedad. También tienen que saber dónde se presentan estos documentos”.
También habló del perfil docente de Grado:
“El perfil del coach es algo diferente a un docente normal. Nos adaptamos al cambio igual que se lo pedimos a ellos. Por ejemplo, yo soy Ingeniero y Máster en Desarrollo y Proyectos de Negocio, Máster en Profesorado y Máster en Gestión de Equipos de Alto Rendimiento. Mi compañero Benjamín es arquitecto, tiene un Máster en Gestión de Equipos, también tiene un Máster en Coaching Personal y es experto en proyectos sociales, María también ha hecho el mismo máster de equipos, ha estudiado ADE, y ha trabajado en consultoría nacional e internacional, además de contar también con el Máster de Coach Personal. Con nuestro equipo lo que intentamos es que los problemas siempre tengan una solución, -ayudas a proyectos que son de los alumnado-, porque los coaches nos complementamos. Intentamos sacar lo mejor de un equipo tan joven. No somos brillantes, no queremos dar clases magistrales sino desbloquearles momentos en los que están bloqueados. Al final, funciona porque sacan resultados muy tangibles, genera un impacto en las personas y en la revolución de la educación y entendemos que hay que promocionarlo. Siempre haciendo la educación de la misma manera no se cambia nada. Este modelo está basado en Finlandia y es un modelo diferente. Salen con 22 años con una adaptación a un puesto de trabajo vertiginosa. La curva de adaptación son dos meses en un caso normal, en un leinner son dos semanas. Incluso algunos de nuestros leinners han decidido en lugar de que les contrate la empresa con la que colaboran seguir colaborando por la proyección que tienen en su propia empresa. Es un perfil que soluciona muchos problemas, sabe trabajar en equipo, sabe liderar equipos, porque son líderes desde que entran en la carrera, y aquí son todos líderes, y lideran líderes, y cuando llegan a un equipo de trabajo y tienen que liderar el equipo les es muy fácil. Con este sistema evitamos la fuga de cerebros ya que formamos a gente para que se queden aquí. Los sacamos fuera, durante periodos cortos, de un mes, un mes y medio y tres meses, para que aprendan a funcionar. Todas las team companys vuelven con un proyecto social. Uno fue poner que un porcentaje de sus beneficios de la venta de sus bikinis a la escolarización de un niño. Hay que aprender a ver qué hay más allá, ver cómo trabajan las personas y cómo viven las personas que elaboran lo que compramos. Ayer volvieron las empresas de segundo a cuarto y mañana el alumnado de la nueva generación”.